Para ofrecer más seguridad al cultivo y asegurar buenas cosechas, el cultivo protegido es la opción ideal. El uso de invernaderos bien planificados con material de alta calidad permite una producción constante y excelente.
Un ejemplo es la producción de FLV (frutas y verduras), según explica Guga Rios, gerente comercial de Tropical Estufas (www.tropicalestufas.com.br). “La lluvia, el granizo y el frío pueden provocar numerosas enfermedades”, dice. Según Guga, tales factores de complicación aumentan el costo de producción e incluso pueden conducir a la pérdida total de la cosecha.
Con el desarrollo de un proyecto que incluye cultivos protegidos, sin embargo, se garantiza la productividad, con costos reducidos. “La tecnología de cultivo protegido permite producir todo el año, aprovechando la contra-temporada para productos a campo abierto”, dice.
El cultivo protegido ofrece recursos para regular la incidencia de la luz solar, la temperatura ambiente, la humedad, entre otros factores, para adaptarlos a las necesidades de cada cultivo. Al crear un microclima específico, protegiéndolo del clima de la naturaleza, las plantas crecen más sanas y vigorosas. “La tecnología de los invernaderos agrícolas permite aumentar las ganancias de los productores al garantizar un cultivo saludable y estable. Hoy existe, por ejemplo, invernaderos con resistencia a vientos de hasta 100 km/h”, ejemplifica Guga Rios.
Agricultura Familiar – El gerente comercial de Tropical Estufas informa que el cultivo protegido ha ayudado mucho a la agricultura familiar. “Antes el productor rural sembraba a campo abierto, en un área grande. Migrando al invernadero agrícola logra cultivar en un área hasta un 70% menor”, dice. Por lo tanto, la rentabilidad aumenta debido a una mayor productividad, mano de obra reducida y menor consumo de insumos.
“Entre los principales beneficios del cultivo protegido se encuentran el aumento de la productividad, el aumento del valor agregado, la producción a largo plazo y el bajo consumo de pesticidas, que incluso pueden reducirse a cero en el sistema orgánico. El cultivo de hortalizas en general, tomates, pimientos de colores y flores ya hacen uso del cultivo protegido y obtienen excelentes resultados”, concluye Guga Rios.