La
lavanda es una de las plantas aromáticas por excelencia, que es ideal para tener en el jardín, la terraza o el balcón de casa, ya que además de su bonito color violeta y del característico y agradable aroma que desprender, es muy fácil de cultivar y de cuidar, ya que es una planta de carácter rústico, con la que no tendrás que esforzarte demasiado para disfrutar de ella.

Pero, ¿Cómo cultivar lavanda? Porque por muy fácil que sea, si no sabes cómo plantarla, te va a costar conseguir unos buenos resultados, ya que, como todas las plantas, la lavanda tiene sus propias particularidades.

Por ello, a continuación te vamos a dar los pasos para el cultivo de la lavanda y una serie de consejos que te serán de gran ayuda para disfrutar de esta bella planta de hojas violetas y un persistente aroma. ¡Toma nota!

Cómo plantar lavanda?

Lo primero que debes saber es que se puede
plantar lavanda con esquejes o semillas, en función del tipo de idea que tengas pensada o de dónde vayas a plantarla.

• Plantar lavanda con esquejes:

Para cultivar lavanda en esquejes, necesitarás tallos de alrededor de 10cm de largo, pudiendo colocarlos en una maceta o directamente en la tierra. Lo más importante es que independientemente de dónde la plantes, te asegures de que el terreno sea seco y tenga una buena exposición solar, así como que esté alejado de otras plantas que puedan perjudicar su desarrollo. Lo ideal es dejar un mínimo de medio metro entre cada planta.

Para ello, tienes que cortar la rama del esqueje, pelar las hojas inferiores y colocarlas sobre tierra de arena mezclada. Para enraizarla necesita una buena humedad, por ello es importante regar la lavanda regularmente, especialmente durante los meses más calurosos.

Si eres constante con el riego y recibe una buena exposición solar, en un año tendrás la lavanda lista para el trasplante.

• Plantar lavanda en maceta:

El proceso para plantar lavanda en maceta mediante semillas es el mismo, con la particularidad de que en la primavera tendrás que replantar y cambiar el suelo.

En ambos casos, para cultivar lavanda es fundamental que la tierra esté seca y cuente con arcilla expandida, ya que de esta forma favorecerás el drenaje. Asimismo, debes regarla regularmente, pero en pequeñas cantidades, ya que si llega a inundarse podrías tener problemas de descomposición de las raíces.

¿Cuándo plantar la lavanda?

Respecto a cuándo plantar lavanda,
a principios de otoño es el mejor momento para el cultivo, ya que es cuando se da el clima idóneo, con temperaturas suaves, lluvias moderadas y un sol menos intenso. Si la plantas en otoño, estará lista para florecer en primavera.

Esto es así si vives en una zona de clima cálido o suave, pero si la vas a plantar en un clima más frío, lo mejor es plantar lavanda en primavera, para así evitar las temperaturas excesivamente bajas, que podrían afectar al desarrollo de la planta.

Poda de la lavanda

Dado que se trata de una planta que crece muy rápido,
deberás podar la lavanda al menos una vez al año, antes o después del periodo de floración. No debe ser una poda demasiado agresiva, sino que lo recomendable es dejar la planta a la mitad de su tamaño.

Asimismo, para evitar un crecimiento excesivo, también es recomendable delimitar la plantación de lavanda con barreras, ya que de esta forma protegerás el resto del jardín.

Ya sabes cómo cultivar lavanda y todo lo que debes tener en cuenta para conseguir los mejores resultados. Ahora solo te queda dar el paso para disfrutar de esta planta aromática en tu jardín o terraza.

Fuentes Consultadas

Plantas aromáticas para huertos urbanos: Cultivo y Propiedades. https://www.dival.es/sites/default/files/medio-ambiente/Estudio3.pdf

El cultivo del lavandín. ¿Una alternativa rentable para nuestro campo?. https://www.mapa.gob.es/es/agricultura/temas/medios-de-produccion/franciscogomezcultivodellavandin_tcm30-483046.pdf